El piso tiene una superficie de 122 m² más unos 45 m² de terrazas cubiertas y descubiertas y ofrece unas inmejorables vistas sobre la bahía de Palma. Ha sido reformado con materiales de muy alta calidad y buen gusto y ofrece mucho espacio exterior en varias terrazas donde se puede elegir sol o sombra. Lo especial es que también hay un jardín privado de aprox. 400 m² con una piscina nueva de aprox. 44 m², lo que convierte esta propiedad en algo muy especial. El piso en sí se distribuye en una zona de entrada, un salón-comedor abierto al mar con cocina contigua, trastero así como 3 dormitorios y 2 baños (uno en suite). Desde el dormitorio principal y la cocina también se puede disfrutar de una fantástica vista al mar. La zona del jardín aún se está terminando.
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